Habla el padre del joven atacado por un hijo del viceintendente de Macachín Gustavo Calvente. La Dirección General de Niñez y Adolescencia apela este lunes la negativa de la jueza Manera (foto) de que el menor sea internado en el IPESA.
“Estoy dolido y preocupado, pero al mismo tiempo contento de tener a mi hijo con vida”. El que habla es “Chiqui” Quaranta, padre de Bruno, el joven de 21 años atacado a hachazos por uno de los hijos del viceintendente de Macachín, Gustavo Calvente, el domingo de la semana pasada.
Entrevistado por el programa radial Cambalache, de Cadena Sur 101.5, Quaranta mantuvo ayer un discurso componedor y se mostró preocupado no solo por la “salud mental” de su propio hijo sino también por el joven atacante y por “el resto de la juventud de Macachín”.
“Como padres, todos tenemos mucho que aprender”, reflexionó. También reveló que el mismo día de la agresión habló con los padres del menor y que los notó “preocupados”.
“Yo soy consciente de que tengo que estar tranquilo, para acompañar a mi hijo… La verdad es que se salvó de milagro. Con tres centímetros más de profundidad que hubiera tenido una de las heridas otro hubiera sido el resultado”, destacó.
Quaranta también contó que dialogó “a conciencia” con sus otros hijos y los amigos del chico atacado para “evitar cualquier tipo de represalias”. Aunque aclaró que nombró abogados para “que se ocupen del tema”.
Apelación
El director general de Niñez y Adolescencia, José Ignacio de la Iglesia, adelantó ayer en diálogo con El Diario que hoy, lunes, apelará -con el asesoramiento de la Fiscalía de Estado- la decisión de la jueza de Menores, Gabriela Manera, de que el menor acusado no sea internado en el IPESA.
“Nosotros consideramos que es la herramienta concreta que tiene el Estado pampeano para tratar este tipo de casos, entendemos que no hay ningún derecho vulnerado (como sostiene Manera) sino que tenemos el caso de un chico en conflicto con la ley penal, porque está acusado de intento de doble homicidio”, destacó el funcionario.
De la Iglesia reveló que el sábado, a última hora, el menor fue retirado por el equipo técnico del organismo a su cargo del área de Salud Mental -donde estaba varado desde el viernes- y quedó alojado ahora en “un lugar de resguardo”.
– ¿Cuál fue la respuesta de la jueza cuando ustedes pidieron formalmente que el menor fuera alojado en el IPESA?
– En principio la jueza ordenó el egreso del chico de Salud Mental y nos ratificó la guarda…
– ¿Pero dio algún argumento de por qué no quiere que vaya al IPESA?
– No, no hay un fundamento… No se expide al respecto, digamos. En cuanto al IPESA, es como que sostiene que tiene que ser el último dispositivo a aplicarse. Incluso corrió traslado a la asesora de Menores (Graciela Massara) y al defensor oficial Andrés Olié.
– ¿Y se sabe cuál fue la respuesta de Massara y de Olié?
– La jueza resolvió producto de ese traslado que corrió…
– ¿Tienen otro antecedente similar a este donde a un chico acusado de intento de doble homicidio la jueza de Menores no quiera internarlo en el IPESA?
– Yo hace poco que estoy en el cargo, al menos a mí no me había tocado todavía.
Conflicto de poderes
El adolescente de 17 años, hijo del viceintendente de Macachín, cumplirá los 18 en el mes de junio. Está acusado de intento de doble homicidio contra su exnovia y al actual novio de la chica. Desde el viernes pasado, luego de la intervención de la jueza de Menores, Gabriela Manera, se generó un serio conflicto de poderes.
El chico estuvo “varado” desde el viernes hasta el sábado a la noche en el área de Salud Mental del Hospital Molas porque la Subsecretaría de Desarrollo Humano y Familia y la Dirección General de Niñez y Adolescencia -ambos organismos dependientes del Ministerio de Bienestar Social- decidieron plantarse ante la jueza Manera y rechazar la petición para que el adolescente vaya a la casa de una tía y no sea alojado en el IPESA.
Las autoridades gubernamentales necesitaban un certificado de alta médica que los profesionales médicos se negaron a otorgar con el argumento de la postura judicial que hizo llegar Massara.
Finalmente, a última hora del sábado, la jueza dispuso que el chico recibiera el alta de Salud Mental y que quedara bajo la guarda de Niñez y Adolescencia, “para que sea alojado donde el organismo disponga”. Pero desde esa Dirección quieren que la magistrada resuelva si puede ir al IPESA, algo que no fue especificado en la resolución y motivará la apelación de hoy.
Sangriento ataque
El furioso ataque de uno de los hijos del viceintendente Calvente ocurrió durante la madrugada del pasado domingo 20 de abril, a las 6 horas. Las víctimas (la chica, de 17 años, y su actual pareja, de 21) llegaron a una casa ubicada en el barrio Los Sauces, de Macachín.
Cuando ingresaron a la vivienda, en una habitación estaba el exnovio de la chica. En sus manos tenía un hacha que había sacado del garaje.
Allí, lanzó un feroz ataque contra la pareja actual de su exnovia. El chico atacado recibió cortes en los brazos, los antebrazos, el cuerpo, la cabeza y el cuello. La chica quedó con moretones en todo su cuerpo y también recibió un hachazo en una mano.
El joven herido huyó hacia el boliche Batachá y dio aviso a un móvil policial, que salió hacia la casa. En ese lapso, el joven atacante retuvo a su exnovia. Cuando escuchó las sirenas policiales, salió corriendo, pero fue demorado. El juez Daniel Sáez Zamora ordenó que quede en libertad. Pero el caso llegó luego a las manos de la jueza Manera, ya que el chico es menor de edad.
Fuente El Diario de La Pampa