Macachín: Productora rural se queja por el basurero municipal.


En la última sesión ingresó un nuevo reclamo de María del Carmen Torrella, propietaria de un predio rural que linda con un espacio donde funcionaba parte del basurero municipal, lugar donde hoy la desidia de vecinos los lleva a seguir arrojando deshechos. La mujer hace varios años que lidia con la falta de respuestas por parte del estado comunal que tiene la responsabilidad de controlar estas acciones.

Torrella ha formalizado innumerables reclamos a los diversos gobiernos municipales. En una carta enviada al Concejo Deliberante en abril de 2008, la productora historiaba que “en los años ’90 se lo pedimos a Amaury Díaz, en el 2002 a José Luis Orozco y ahora a Jorge Luis Cabak. Pero ahora la cosa empeoró porque desde hace un tiempo se produjeron incendios que afectaron a alambrados y postes”. Otro de los argumentos que Rorrella esgrimió para su reclamo es que la actual modalidad del basurero “produce contaminación del aire y las napas”.
Entonces los concejales tuvieron pocas respuestas para los reclamos de la vecina. El viceintendente, Jorge Monteagudo (PJ), había informado que “ayer, con el intendente, hicimos una visita al lugar y estamos esperando un informe de bomberos por el incendio último. Una respuesta van a tener”. Sin embargo esa promesa ha caído en saco roto porque, a cuatro años de aquel reclamo, las demandas de Torrella son las mismas.

Proyecto en saco roto.
Por ése tiempo dos alumnas del Instituto Manuel Belgrano, Mercedes Demirjián y Sofía Taverna, habían presentado un proyecto ante el Concejo Deliberante donde exigen urgentes medidas para mejorar el desastroso estado del basurero municipal. Entre otras razones adujeron que se está violando la Constitución Nacional.
Durante su presentación el recinto del Concejo nunca estuvo colmado por estudiantes pertenecientes a las comunidades educativas del Instituto Manuel Belgrano y la EGB, quienes apoyaron la iniciativa ecológica.
Las estudiantes le recordaron a los ediles que la municipalidad está adherida por ordenanza al Consorcio Provincial para la Basura, pero que no se utilizan los métodos adecuados en su tratamiento. También se quejaron que falta información y concientización en los ciudadanos sobre el impacto ambiental que produce esta situación.
Las chicas proponen una tarea de reciclaje “no enterrando desechos de valor”. Una campaña de concientización “sostenida en el tiempo” incluída folletería para repartir en domicilios e instituciones. Y la selección domiciliaria de residuos sólidos urbanos, entre secos y húmedos.
Cuando las jovencitas defendieron su trabajo sentadas en la mesa del Concejo dejaron mudos a los ediles, especialmente a los del bloque justicialista, partido al que pertenece el intendente Jorge Cabak. Les enrostraron no haber cumplido con la Constitución Nacional, situación que parece no haberse modificado mucho.
(La Arena) 

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