“Después de mucho analizarlo, he decidido no acompañar el proyecto de Interrupción voluntaria del Embarazo”. De esta manera se expresó el senador nacional al anunciar su voto. Marino era uno de los legisladores que aún tenía en duda su postura. Su definición se basó principalmente en las audiencias que mantuvo en la provincia.
“Cuando comenzó el debate en el Senado anuncié que me tomaría un tiempo a estudiar el tema y sobre todo para escuchar a todos los pampeanos pero que mi decisión la sabrían antes del debate en el recinto y así lo estoy manifestando. Yo no especulo como lo hicieron algunos diputados. Me tomé el tema con la seriedad que amerita”, sostuvo el legislador.
Respecto a las razones que lo llevaron a tomar esa decisión, Marino resaltó que no es una cuestión de “pensamiento personal” sino que su intención es representar a la sociedad pampeana, la cual, en su mayoría, le manifestó estar en contra de la legalización.
“Estuve reunido con decenas de personas y grupos representantes de ambas posturas. Además mantuve vía mail, teléfono y redes sociales cientos de conversaciones con pampeanos que me manifestaron su opinión. En una ley tan controversial como esta, donde no hay amplios consensos no importa mi postura personal, considero que lo mejor es escuchar e intentar trasladar el pensamiento de quienes me eligieron para representarlos”, aseguró.
Eje en la concientización en la provincia
Consultado respecto del posible rechazo que recibirá su postura entre quienes apoyan la legalización, Marino resaltó el “gran marco de responsabilidad y respeto en que se dio el debate en la provincia” y se mostró confiado en que ese respeto primará aún cuando haya una parte de la sociedad que no comparta su decisión, recordando que “es parte de seguir creciendo como sociedad democrática respetar la opinión del otro mas allá de estar o no de acuerdo”.
Por otra parte, bregó por un mayor trabajo en concientización y educación sexual: “El Estado tiene una enorme responsabilidad en lo que respecta a educar e informar en educación y prevención sexual. La escuela debe ser, junto con el hogar, el lugar donde los chicos aprenden a cuidarse y se informan y el sistema de salud debe proveer las herramientas para que ese cuidado sea efectivo. El primer paso es siempre la prevención y el Estado debe estar presente garantizándolo”.
En relación a esto, resaltó la importancia que los jóvenes tuvieron en su decisión: “Tuve reuniones con muchos jóvenes estudiantes que solicitaron darme su opinión. Por supuesto hubo representantes de las dos posturas pero hay un dato que me parece importantísimo resaltar, la mayoría de ellos manifestó no haber recibido prácticamente ninguna charla sobre educación sexual durante su paso por el colegio y reconocieron que el conocimiento que tienen sobre el tema se basa en las conversaciones con hermanos, amigos o familiares pero hay un gran desconocimiento en prevención y cuidados”.
Y agregó: “No es menor que del último informe ´Aprender´ de La Pampa surge que la principal temática que los jóvenes exigen que se les amplíe en la escuela es justamente educación sexual. Ahí el Estado está fallando. Hace falta más presencia que permita evitar posteriores situaciones no deseadas. El eje debe estar en la educación y en la prevención. A eso apuesto y en eso vamos a seguir trabajando”, concluyó el legislador.